8 pasos para crear una estrategia de contenidos

En posts anteriores ya les he hablado sobre lo qué es el marketing de contenidos y del por qué deberías de poner en práctica tu estrategia de contenidos; ahora proundizaré un poco más, con los pasos que deberías de seguir para crear una estrategia de contenidos exitosa:

1. Conoce a tu empresa

Antes de comenzar cualquier cosa, es importante tener totalmente claro las características de la empresa y analizar cosas como:

• Quién eres (valores, visión, misión, valores)
• Cuáles son las necesidades de la empresa.
• Qué productos o servicios se ofrecen y cuál es su precio.
• A qué sector de la población se dirige lo que tu ofreces y cómo la empresa se relaciona con sus clientes.

También puede ser de utilidad saber qué es lo que las personas dicen sobre la empresa y qué tan positivos o negativos son estos comentarios.

Con esto podrás tener una idea de la imagen que quieres proyectar con la estrategia de contenidos, además de ayudarte al momento de establecer los objetivos de ésta.

2. Conoce a tu competencia

Para poder aplicar una buena estrategia de contenidos, deberás saber qué es lo que la competencia está haciendo, para esto puedes responderte preguntas como:

• ¿Qué contenidos esta generando?
• ¿Con qué frecuencia lo hace?
• ¿En qué canales los distribuye?
• ¿De qué manera se comunica con sus seguidores o sus clientes?
• ¿Qué tanto éxito está teniendo su estrategia de contenidos?
• ¿Cómo las personas perciben a las empresa de la competencia?

Una vez que hayas reunido toda la información de tu competencia, tendrás un mayor conocimiento del estado actual de mercado en el que te desenvuelves y de qué tan efectivas han sido ciertas estrategias específicas para ellos, para no repetir sus errores o mejorar sus estrategias.

3. Conoce a tu público

Para que el contenido que generes sea de utilidad y de interés, para tu público objetivo, es primordial conocer a quiénes te diriges.

Crea un perfil de tu público meta que incluya su edad, sus intereses, su localización, sus hábitos en la web, su nivel educativo, su profesión, sus ingresos, sus problemas o necesidades y sus motivaciones, entre otras cosas.

4. Conoce tu objetivo

Ya que sabes cuáles son las características importantes de la empresa, conoces a la competencia y has creado un perfil de tu público meta, es momento de determinar tus objetivos.

¿Qué es lo que quieres conseguir aplicando la estrategia de contenidos? Es la pregunta que deberás contestar para hacerlo.

Recuerda que para que un objetivo funcione debe de estar formulado en términos medibles y ser realista (o posible de alcanzar).

5. Elige el tipo de contenido

Lo siguiente es escoger qué contenidos son los más adecuados para cumplir tus objetivos: articulos, videos, infografías, imágenes, etc.; así como también los temas más adecuados a tocar.

Puede ayudar el realizar un análisis del contenido que has publicado hasta la fecha, para determinar cuál es el que te falta o necesitas para satisfacer las necesidades de información de tus clientes y lograr tus objetivos.

6. Conoce y elige los canales de difusión

Los canales disponibles son muchos, las redes sociales, ebooks, newsletter, las redes sociales, colaborando en otros sitios web, los banners o hasta los métodos de pago.

A la hora de elegir la adecuada para tu estrategia deberás tener en cuenta cuatro cosas: tu público objetivo, tus recursos, los canales utilizados por tu competencia y el tipo de contenido que crearás.

7. Crear contenidos

Ahora ya puedes comenzar a generar tus contenidos. Nunca pierdas de vista que mientras más originales, interesantes, amenos y útiles sean, una mayor probabilidad de que sean consumidos y compartidos.

8. Analizar los resultados

Aunque haya puesto éste como el último paso para crear una estrategia de contenidos, en realidad es algo que se debe de estar haciendo todo el tiempo. La medición de diferentes parámetros podrá ayudarte a saber el éxito que determinado contenido está teniendo.

Hay que recordar que cualquier estrategia de marketing digital debe de ser lo suficientemente flexible, para que se pueda modificar en el camino, de acuerdo a los resultados obtenidos, para tener una mayor eficacia, eliminando lo que no funcione y agregando lo que si.

El tráfico generado, el número de clics, los comentarios recibidos, qué tan compartido es el contenido, la tasa de conversiones, y el retorno de la inversión, son solo algunas de las cosas que se puede medir.