6 verdades que todo emprendedor enfrentará

Sucede muchas veces en el mundo de los startups: una decisión crítica se tiene que hacer, va afectar todo lo que venga después de ella y determinará el destino de la compañía. Puede ser sobre incluir a un inversionista o invertir en una nueva tecnología. Pero muchos besos fundadores no consideran todas las opciones, incluso se niegan a hacer lo que para virtualmente todos es la mejor decisión. La startup navega un poco más. Y después falla.

No te puedo decir cuántas veces he platicado con emprendedores que me presentaron una “idea nueva y revolucionaria” que ya se había hecho. Incluso si no hay un producto equivalente de mercado actual, usualmente es sólo cuestión de tiempo. Apenas que seas un renombrado experto en ese campo, lo más probable es que otros ya hayan tenido la misma idea y muchos de ellos están trabajando en ella en este momento. ¿Y, eso qué? Un enfoque realista debe de ser concentrarse el diseño, la distribución, el equipo y mantener a la competencia el margen. ¿La idea en si misma? Bueno, las ideas están sobrevaloradas.

3. Todos son tus nuevos jefes

¿Pensaste que ser emprendedor significaría ser tu propio jefe? Eso no tiene sentido. Como emprendedor, tendrás un gran número de jefes: tus clientes, tus inversionistas, incluso tus empleados te dirán que hacer. Y tú tendrás que escucharlos porque los necesitas. Tu rol es animados a tomar decisiones y protegerlos… No dictar todas sus acciones.

4. Tu plan actual no es el mejor

El general Dwight D. Eisenhower alguna vez dijo, “Cuando te preparas para la batalla, siempre he encontrado que los planes son inútiles, pero planear es indispensable.” Justo como el campo de batalla, el mundo de las startups es caótico e impredecible. Los competidores harán movimientos sorpresas, las regulaciones del gobierno cambian, y los retos tecnológicos están a la orden del día. Lo que es peor, los emprendedores muchas veces están construyendo cosas que no tienen precedente, por lo tanto tienen que proceder asumiendo cosas, cosas que solamente encontrarán si son ciertas a través de la implementación. Las empresas que sepan cómo adaptarse y actuar rápidamente a las nueva información son las que tendrán éxito, no aquellas que implementen perfectamente un plan viejo.

5. No hay tiempo para eso

Los emprendedores son visionarios, por lo que tienden a ser detallados y muy elaborados con las características de su producto. Pero sorpresa. Tu desarrollo de tres meses tardará un año en completarse. Entonces ¿Por qué no te concentras en aquellas pocas que de hecho puedes hacer y las pruebas? Mantenerse concentrado y aprender a decir NO son algunas de las habilidades más importantes de un emprendedor.

6. Tal vez estés destinado al fracaso

Tal vez haya muchos hechos que no conoces sobre la idea de tu producto, sus usuarios, el mercado o la competencia. Tal vez haya dudas sobre tu motivación, lo que hará que tu producto fracase. Mientras tanto, ese hecho desconocido este esperando afuera para que lo descubras. Y aún así no lo conoces y para conocerlo deberás seguir tu plan hasta que te lo encuentres. Esta es la razón por la cual los emprendedores no le temen a las malas noticias. Al contrario, tienes que ver en el abismo y encontrar respuestas, sin confundir la persistencia con testarudez.

Los emprendedores son personas con prejuicios, tendencias irracionales y apegos emocionales iguales a los de la mayoría.

El ambiente de las startups, sin embargo, con su incertidumbre y su dependencia de un pequeño número de tomadores de decisiones, magnifica estas tendencias y el más mínimo error puede repercutir durante años e incluso llevar a una empresa hacia el fracaso. Es importante que los emprendedores se examinen a sí mismos de cerca, descubran a su motivación y su capacidad para manejar la incertidumbre y el fracaso antes de aventurarse en una startup. Si lo hacen, sus posibilidades de éxito aumentarán.

Fuente: Entrepreneur